El tiempo también es salud.

A través de la vida, aprendemos una multitud de competencias útiles para vivir, como manejar, o leer un buen libro y disfrutarlo, a viajar, o cumplir nuestras obligaciones fiscales, pero difícilmente aprendemos a priorizar nuestro tiempo y esto lo vamos aprendiendo -o mal aprendiendo- a consta de resolver problemas ocasionados por no saber hacerlo bien.

Hoy en día, en esta época de la información y el conocimiento, nuestra vida pasa frente a nuestros ojos de forma acelerada, el día se percibe más corto contra la cantidad de cosas que queremos terminar de hacer, y al día siguiente ya estamos con la lista de pendientes que solo crece y crece, pero ¿porque siempre andamos a la carrera? los aspectos importantes como lo es nuestra familia, la salud e inclusive nuestros sueños se van quedando sin darnos cuenta en un segundo plano.